LA BRÚJULA

El monólogo de las ocho: "El Gobierno se precipitó al plantear uno de tantos experimentos pedagógicos sin consenso"

El monólogo de Rafa Latorre en La Brújula con su monólogo de la actualidad política.

Educación estudia aplazar un año la nueva selectividad

ondacero.es

Madrid | 02.12.2022 20:32

El Gobierno ha reculado y aplaza un año la entrada en vigor de la nueva selectividad. Así que la prueba para entrar en la Universidad será muy parecida a la actual, al menos hasta 2028. ¿Fin del lío de la EBAU? No, sólo se pospone el debate pero el colectivo académico que se había celebrado contra la nueva selectividad lo celebra como un triunfo.

Es una buena noticia. Suele entenderse que el que los políticos se corrijan es un fracaso. Nada más lejos. El Gobierno se precipitó a la hora de plantear uno de tantos experimentos pedagógicos sin sentido ni consenso y al advertir del descontento de los profesores han decidido retirarlo. Bien está, pues.

¿Por qué la nueva selectividad ha despertado las protestas de profesores y padres? Porque consideran que es cualquier cosa menos selectiva. Que rebaja el nivel de tal forma que terminará arrastrando también al bachillerato. Porque esto es algo que va en la condición humana. El último año de la educación secundaria está enfocada a aprobar la prueba de la evaluación y en función de su rigor o de su excelencia, fija sus contenidos y su nivel. Cuanto menos exigente sea esa prueba, menor densidad tendrá el curso. Menos aprenderán los alumnos, en definitiva.

Aquí en la Brújula llevamos semanas advirtiéndoles del descontento de los profesores y de las deficiencias de este sistema. La mejor parábola de lo ocurrido. Despertó un cierto estupor entre el profesorado de secundario y sobre todo en el mundo universitario un formato que, según su propuesta inicial, implicaba condensar en una única prueba de madurez las asignaturas de Lengua Castellana y Literatura, Lengua Cooficial, Lengua

Extranjera, Historia e Historia de la Filosofía. Hasta ahora estas materias se habían evaluado en pruebas por separado, pero el Gobierno quería juntarlas en un solo examen muy simplificado: con apenas 25 preguntas tipo test y de rellenar huecos y tres preguntas de desarrollo de un máximo de 150 palabras cada una.

¿Cómo es posible evaluar la lengua española sin necesidad de que el alumno emplee la lengua española? ¿Con un test? En la Brújula hablamos con Serafina García, directora del Departamento de Filología Española de la Universidad de Oviedo y coordinadora de la Ebau en Asturias, que explicaba muy bien cuáles son sus reticencias y las de sus compañeros.

Bueno, pues bien está la rectificación. Es de celebrar que el ministerio de Educación haya escuchado al colectivo académico y haya pospuesto un año la entrada en vigor de esta nueva selectividad.

Bienvenidos a la Brújula. Hasta las 8 con todas las noticias y a partir de las 10 con la tertulia y el análisis político. Por entonces, a esa hora, creo que ya habrá comenzado la cena de Navidad de Ciudadanos. Va a ser una cena movidita. Hay que tener cuidado con no mezclar la política con las ceremonias navideñas, que luego las cosas terminan mal…

Bueno, no hay peligro de que esta cena vaya a terminar en ruptura porque la ruptura ya es un hecho. Inés Arrimadas y Edmundo Bal, otrora inseparables aliados, se enfrentarán en unas primarias para liderar el partido. La refundación ha derivado en una lucha por el poder entre la número 1 y el número 2. Que Inés Arrimadas tenía una cada vez más nutrida contestación interna era algo perfectamente conocido por todos. Desde hace tiempo. Algunos, como Luis Garicano ya no están en la política pero otros como Francisco Igea han vuelto a expresar en voz alta su oposición.

Hace días además trascendía el enfrentamiento entre Arrimadas y Bal. Las divergencias en torno a la posición de los naranjas respecto a la ley del sólo sí es sí y los diversos puntos de vista sobre el modelo estructural hacia el que debe caminar el partido en su nueva etapa.

En el PSOE la vida interna es mucho más plácida, porque está Sánchez como un pantocrátor en el tímpano de Ferraz. No se mueve nadie y quien se mueve… zas… recibe una llamada de Santos Cerdán, apparatchik, secretario de Organización y comisario encargado de que nadie alce la voz. Hoy Carlos Alsina ha hecho Más de uno desde Zaragoza y allí ha entrevistado al díscolo fugaz, Javier Lambán. Hoy el presidente aragonés se ha despertado con portadas muy poco favorecedores, que dicen que fue reconvenido por Ferraz y que por eso corrigió inmediatamente sus críticas a Pedro Sánchez.

Él reconoce que habló dos veces con Santos Cerdán después de haber dicho que a España le hubiera ido mejor con otro líder socialista que no fuera Pedro Sánchez. La primera le explicó que sus elogios a Javier Fernández no eran una impugnación de Sánchez, pero eso es metafísicamente imposible. ((Es como decir… que…))) La segunda llamada fue para explicarle que saldría a matizar ante la prensa, para que todos lo escucharan.

Ahora que Lambán sigue pensando lo mismo respecto del rumbo de España, que es lo sustancial de su conferencia del otro día. Eso es lo sustancial y la crítica a Sánchez es lo anecdótico… sobre todo porque ya va implícito en lo primero. Lambán ha hecho una interesante analogía histórica para referirse a la política de Sánchez en Cataluña

Por un momento cuando dijo que Pedro terminará como Azaña, alguno debió dar un respingo: ¡exiliado! No, no, desengañado con Cataluña, no apuremos tampoco demasiado las analogías históricas. Tampoco Sánchez sería capaz de escribir Velada en Benicarló.