Les voy a decir una cosa. Hay vida después de la política. Para algunos gobernantes, incluso hubo vida antes de la política. Schwarzenegger, por ejemplo -probablemente el apellido más difícil de deletrear de todos los tiempos- era actor antes de actuar como gobernador de California y ahora vuelve a serlo, una vez que cesó en ese cargo
El monólogo de Alsina: Hay vida después de la política
Les voy a decir una cosa. Hay vida después de la política. Para algunos gobernantes, incluso hubo vida antes de la política. Schwarzenegger, por ejemplo -probablemente el apellido más difícil de deletrear de todos los tiempos- era actor antes de actuar como gobernador de California y ahora vuelve a serlo, una vez que cesó en ese cargo