La entrevista ha arrancado con la diputación permanente y el trabajo que va a tener los próximos meses: “Hasta el día 13 de diciembre, en que se constituyan las nuevas cámaras, la Diputación Permanente puede derogar o convalidar decretos leyes. Esa es una función que probablemente tenga que ejercer, si el Gobierno tiene que dictar algún decreto ley. Es de prever que en este tiempo la Diputación Permanente se reúna en alguna ocasión. De hecho, la mesa de esa Diputación Permanente ya la tengo convocada para el próximo miércoles”.
Hace unos días, Bono dio las gracias a Zapatero por lo que “hayas hecho por España”, y hay quien ha dicho que la frase tenía una segunda lectura. “A un jefe del Gobierno - Zapatero, Aznar, González, Suárez, quien quiera que sea – el pueblo no tiene que estarle agradecido por haber sido presidente. Es al revés. Somos los políticos los que agradecemos o debemos agradecer la confianza que se nos da. En este caso quise resaltar que en estas semanas y en estos últimos meses yo he visto al presidente del Gobierno sufriendo especialmente. Hubiese sido más cómodo haber dimitido. Pero ha querido hacer lo que no ha sido agradable y popular. Ahí es donde estaba el agradecimiento más singularizado”.
Sobre las críticas de Bono a las candidaturas de Alfonso Guerra y Manuel Chaves, ha reconocido que “Mis declaraciones fueron poco afortunadas. De una manera poco prudente dije: ya tenemos suficientes experiencias como para dejar paso a otros. Y no debería de haberlo dicho. Yo debo hablar por mí y cada uno que hable por sí. En política yo he sido muy bien reconocido. Me voy absolutamente satisfecho de lo que he hecho. No quiero más, no puedo pedir más”.
La entrevista ha continuado sobre el tema Bildu y si se le está haciendo campaña con todo lo que está montado alrededor. El presidente del congreso de los diputados está “absolutamente convencido de que estos asesinos, que están cumpliendo sus penas no pueden ser presentados, si no es faltando a la lealtad debida a España, como si fuesen pobres gentes que ya han sufrido mucho. Han hecho sufrir mucho, han asesinado mucho y lo que deben hacer es cumplir hasta el último día en la cárcel. Dicho esto, y dicho con rabia, porque he ido a suficientes entierros, como para no olvidar a las víctimas y no tener la más mínima compasión por los verdugos... Dicho esto, tenemos que recordar que estos que se ponen ahora pendientes en la oreja para dar la impresión de ser bondadosos, como el Otegi, pues fue quien le pegó un tiro en la pierna a Gabriel Cisnero o el que secuestró a Javier Rupérez. Gabriel Cisneros no puede dar testimonio de lo que digo, pero Rupérez sí. Y no hay que olvidarse que lo mejor que puede ocurrirnos es que ETA acabe. Se trata de lo peor de cada pueblo y lo más malo de cada familia de España. Y no estoy dispuesto, haya elecciones o no haya elecciones, a concederles ni un gramo de arrepentimiento, porque no lo han tenido. Es mala gente y a las pruebas de los casi mil asesinatos me remito. Si yo fuese presidente con un grupo parlamentaria integrado por cómplices de asesinatos no sé como lo llevaría. No me lo imagino”.
Sobre la campaña de Rubalcaba y las encuestas desfavorables para el PSOE, “Hasta que no pasa el último santo, no conviene dar por acabada la procesión. Las cosas no están tan bien como quisiera que estuviesen. Rubalcaba ha aceptado una responsabilidad y tiene que hacer un esfuerzo muy considerable. Yo creo, sinceramente, que lo está haciendo. La campaña electoral es adecuada y está haciendo lo que yo haría. Es el modo de decir que me siento muy identificado con lo que está haciendo”.
Sobre la prohibición de los toros en Cataluña, “Yo no soy partidario de prohibir actividades que, como en el caso de los toros en Barcelona, tienen público. Tienen tanto público que ayer no hubo billetes. Soy comprensivo con quien está en contra de la fiesta, por lo que tenga de daño a los animales, y estoy más en contra de aquellos que se oponen a la fiesta por lo que tiene de nacional. Yo no la hubiera prohibido. A estas alturas, sería mejor decir: yo estoy a favor, yo estoy en contra... Y que vaya a los toros quien quiera, que a nadie se le obliga”.
Parece el final de bono dentro de la política, y es difícil de imaginarlo después de tantos años, y “Yo tampoco me lo imagino, pero me lo voy a tener que imaginar. De entrada tengo que entregarle a José Manuel Lara las memorias, el diario. Luego, soy abogado y me pondré al día. Con un Código Civil yo espero que podamos salir adelante”.
Si se dedicará al derecho y ejercerá como abogado, José bono “Tengo alguna idea de lo que puedo hacer como abogado, como profesional... Pero tampoco crean que voy a dejar mi actividad política como militante del PSOE. Viajaré mucho más y pasaré más días en mi pueblo. Tengo una niña de diez años y aspiro a acompañarla en su pubertad, si me deja. Por ahora me reclama”.