El grueso de esta operación ha sido contra el tráfico ilícito de marfil de elefante africano.
Se han incautado más de 500 piezas valoradas en más de 400.000 euros, tanto tallado como colmillos en bruto.
Entre 2014 y 2017 se han matado unos 14.000 ejemplares cada año y los expertos calculan que la población de elefantes se habrá extinguido en 15-20 años.
Gracias a la técnica Carbono 14 se puede saber con precisión la antigüedad de la pieza de marfil.
Legalmente se puede comerciar con ellas si son anteriores a 1947, posteriormente es ilegal. Entre las especies aprehendidas hay felinos como el ocelote o puercoespín africano.