La industria de contenidos ha calculado que el año pasado dejaron de generarse 21.000 empleos directos y que las arcas públicas dejaron de ingresar 547 millones de euros en impuestos por la piratería.
Lo que más se piratea en descarga o streaming son las películas, series y música, mientras que en videojuegos ha subido hasta el 50% el consumo ilegal de novedades.
Para la directora de la Coalición de Creadores, Carlota Navarrete, los datos evidencian que la ley no se aplica de manera eficaz y que cunde la sensación de impunidad entre los usuarios. "Si ha entrado en vigor una ley que debería atenuar ese tipo de percepción y el efecto es totalmente contrario, es que el mensaje no está siendo claro", ha afirmado.
La industria reclama el cierre de las páginas web pirata y apela a la responsabilidad de los buscadores como Google, ya que ocho de cada diez internautas los utilizan para llegar hasta los contenidos ilícitos.