En el veredicto, hecho público hoy, los miembros del jurado han afirmado que el hombre la mató con alevosía y ensañamiento y han estimado el agravante de parentesco y ninguna circunstancia atenuante como había pedido su defensa.
Una vez emitido el veredicto, la fiscalía y el resto de acusaciones han mantenido su petición de condena de 25 años de prisión.
Durante el juicio, el acusado negó que quisiera asesinarla y dijo que tras la ruptura estuvo inmerso en una depresión en la que solo pensaba en suicidarse porque no tenía ganas de vivir y que tras sufrir un infarto se puso mucho peor.
La víctima, de 47 años y natural de Aranda de Duero (Burgos), era profesora de inglés en el colegio Mar Argentea de Torremolinos (Málaga) y había mantenido una relación sentimental con el agresor durante siete años, relación que habían dejado tres meses antes del crimen.
El asesinato fue cometido el 5 de marzo de 2014 cuando el presunto asesino se desplazó a la vivienda de la víctima en la localidad malagueña de Torremolinos con un cuchillo, que había comprado ese mismo día, escondido entre la ropa.