La secretaria de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, Susana Camarero, junto con el de Seguridad, Francisco Martínez, han sido los encargados de impulsar este organismo privado, el Observatorio Español contra la LGBTfobia -relativo a lesbianas, gais, bisexuales y transexuales-, en la inauguración de unas jornadas de debate y análisis de los delitos de odio.
Y es que el observatorio es una iniciativa de la Confederación Española de lesbianas, gais, bisexuales y transexuales (Colegas), puesta en marcha en enero, y que ambos ministerios respaldan hoy públicamente en una "puesta de largo", en palabras de Camarero, que reafirma el compromiso del Gobierno para visibilizar los delitos de odio.
Precisamente, la escasez de denuncias que llegan a las fuerzas de seguridad es uno de los problemas para concienciar a toda la sociedad sobre las agresiones verbales y físicas que sufre este colectivo, debido, sostiene Camarero, a que las víctimas o bien no se fían de la legislación, desconocen los protocolos de ayuda o son menores de edad.
El pasado año se registraron 1.285 delitos de odio por distintas motivaciones, según el reciente informe del Ministerio del Interior, aunque cuatro de cada diez incidentes se debieron a la orientación e identidad sexual de las víctimas.