Las, para muchos, molestas llamadas comerciales parece que van a llegar a su fin. Así lo ha confirmado el ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López, que ha anunciado este jueves que antes de acabar febrero lanzarán una orden ministerial para "combatir las ciberestafas, las llamadas telefónicas falsas".
Para ello, prohibirán una práctica habitual en la actualidad. Muchas llamadas comerciales se enmascaran tras números de teléfono comunes a cualquier persona, ya sea una línea fija o móvil. Por ello, ha señalado que quedará "terminantemente prohibido" poder hacer una llamada comercial con un número que no sea 800, 900, o que empiece con un prefijo de una provincia española.
"Es decir, no podrá recibir usted una llamada comercial desde un móvil, que eso está pasando hoy. Nosotros recibimos desde un móvil, pensamos que es un conocido, un familiar, no sabemos quién es, y luego resulta que es una llamada comercial. Esto quedará prohibido por la orden ministerial", ha concretado en una entrevista en Rac1.
En caso de que se incumpla, ha avisado que se podrá interponer denuncias en la oficina de atención al consumidor de las telecomunicaciones y se podrán imponer sanciones.
Por tanto, esta norma pretende que cualquier llamada comercial sea identificada al instante por el receptor al observar que procede de un número que comienza por 800 o 900. Según señala la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, las empresas utilizan el 800 y 900 para prestar servicios de información, atención a clientes y asistencia técnica de forma gratuita. El número es gratuito para el consumidor, independientemente de quién realice la llamada.
Asimismo, se contemplan medidas como el bloqueo de números que no empiecen por 800/900 y hagan llamadas comerciales. También números con origen internacional que se enmascaran con numeración española.