Ha sido absuelto de las acusaciones de proxenetismo agravado en banda organizada, cargo por el que se exponía a un máximo de 10 años de cárcel y un millón y medio de euros de multa.
La Justicia no ha encontrado pruebas de que el exdirector gerente del FMI organizara estos encuentros sexuales a sabiendas de que las participantes eran prostitutas, aunque Strauss-Kahn sí ha reconocido su gusto por las "orgías libertinas".
La mayoría de los acusados han sido absueltos, salvo el director de Relaciones Públicas del Hotel Carlton de Lille, pieza clave del caso y que ha sido condenado a un año de cárcel exento de cumplimiento por haber favorecido la prostitución de varias chicas.