Sánchez ha viajado a Zaragoza para reunirse con varias asociaciones y colectivos sociales y antes del encuentro, en una intervención abierta a los medios de comunicación pero sin preguntas, se ha referido a la crisis de los refugiados que afecta "emocionalmente a todos", ha dicho, porque se trata del "sufrimiento de millones de personas" de Irak, Siria o Afganistán.
Ante la cumbre de la Unión Europea sobre los refugiados que comienza el próximo jueves, el líder socialista ha exigido que se pacte entre todas las fuerzas políticas españolas la "posición común" que el gobierno deba defender en Bruselas.
"Me atrevo a decir que la opinión de la mayoría de la Cámara será dar un mandato para defender la solidaridad y el respeto a los derechos humanos", ha vaticinado.
Y, en consecuencia, la del Congreso de los Diputados será una postura "radicalmente diferente" al preacuerdo alcanzado entre Turquía y la Unión Europea.
En este sentido, también ha apelado al espíritu que hizo que el proyecto político de la Unión Europea consiguiera el Premio Nobel de la Paz en 2012, basado en la reconciliación, la democracia y los derechos humanos en Europa, adonde miles de personas vienen "huyendo del terror y la guerra" pero ahora encuentran "indiferencia e insolidaridad".
A juicio de Pedro Sánchez, hay un "punto de acuerdo" entre las que ha llamado "las tres fuerzas del cambio" (PSOE, Podemos y Ciudadanos) para articular un pacto que cambie la posición del Gobierno de España en un asunto "tan transcendental" como este.
Y eso demuestra, ha concluido, que hay "puntos de acuerdo" cuando los partidos dejan a un lado "los sillones" y anteponen a sus intereses el interés general.
También ha puesto en valor la actitud del Gobierno de Aragón en este aspecto, porque fue "el primero" que puso a disposición del ejecutivo de España "todos sus recursos" para acoger a estas personas que huyen de la guerra.
