La comisión de investigación del Senado sobre el 'caso Koldo' citaba para interrogar este lunes a Jéssica Rodríguez, la expareja del exministro José Luis Ábalos que reconoció en el Tribunal Supremo haber sido contratada y cobrar de dos empresas públicas, Ineco y Tragsatec, pero no haber realizado trabajo alguno.
La interrogada no ha acudido presentando un parte médico en la Cámara Alta para no acudir a declarar ante la comisión del 'caso Koldo'.
Rodríguez estaba citada a las 11.00 horas y obligada a responder a las preguntas al no estar imputada, donde la joven declaró totalmente tapada como testigo el 27 de abril.
El Partido Popular consideró que la comparecencia "debe ser aplazada y no suspendida". Así lo comunicaban asegurando que registrarán de nuevo la comparecencia para que acuda "cuando sus circunstancias médicas lo permitan".
Aunque se haya aplazado, deberá responder a lo que se le plantee, ya que no está imputada en ningún procedimiento judicial, lo que implica que no puede acogerse al derecho a no declarar ante la comisión del Senado. La cuestión centrará previsiblemente buena parte de la comparecencia, que se va a producir después de un nuevo informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que recoge un mensaje de Koldo García, el exasesor ministerial, a la que fue presidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, para situar a esa exnovia de Ábalos en Ineco: "Si no José me corta los huevos".
Los investigadores apuntan en ese informe que el exasesor "se prevalió de su relación" con Ábalos para que la presidenta de Adif la contratara y señalan que, según los mensajes intervenidos, "Jéssica Rodríguez no habría asistido a su puesto de trabajo en Ineco" por intermediación del exasesor, quien le dijo que, tras un primer encuentro, no tenía que volver a acudir a su puesto de trabajo.
Rodríguez declaró el pasado febrero como testigo ante el juez del Supremo que investiga el 'caso Koldo'. Entonces dijo que asumía que Ineco y Tragsatec la habían contratado por mediación de Ábalos. De la misma forma comentó que asumía que el piso de la madrileña Plaza de España donde estuvo viviendo tres años lo pagaba el exministro.
La propia mujer, pese a ello, llegó a comunicar a Ineco que "generalmente" tenía "mayor carga de trabajo de lunes a jueves" y que incluso necesitó "hacer más horas por el cúmulo de trabajo", según unos correos electrónicos aportados por la compañía pública.
Por su parte, Ineco ha comunicado al Supremo que con la ex de Ábalos siguió el proceso habitual de contratación, que era no publicar vacante, que solo la entrevistó cuando ya había sido elegida y que debía trabajar en "la localización indicada" por Adif.
Y Tragsatec ha informado al juez instructor de que contrató a la mujer entre 929 candidatos y que Adif avaló su trabajo, ya que estaba "adscrita" a la Presidencia del ente público ferroviario.
El presidente de Tragsa, Jesús Casas, grupo del que depende Tragsatec, compareció hace unas semanas en la comisión del Senado y consideró "absolutamente asqueroso" que Rodríguez no fuera presencialmente a su puesto de trabajo, dijo que "no fichó" e incidió en que fue contratada para un encargo de Adif, quien controlaba si iba o no.
El precedente de la expareja de Koldo
Cuando declaró en el Supremo el pasado 27 de febrero, la exnovia de Ábalos llegó a la sede del alto tribunal con abrigo y grandes gafas de sol negros y visiblemente compungida.
Precisamente, en la última comparecencia de la comisión, la expareja de Koldo García, Patricia U., acudió con unas gafas de sol y un pañuelo cubriéndole la cabeza y parte del rostro, acogiéndose a su derecho a no declarar por su condición de investigada en la causa judicial.
Esa vestimenta motivó que el presidente de la comisión, el 'popular' Eloy Suárez, suspendiera la sesión durante unos minutos para comprobar la identidad de la mujer, dadas las quejas de PP, UPN y Vox, que criticaron que su apariencia dificultaba su identificación.
Fuentes del PP, que han calificado de "show" la actitud de la expareja de Koldo García, han avisado de que "si sucede de la misma manera" con Jéssica Rodríguez, actuarán "igual".
"Tenemos que creernos que es ella", aseguró el presidente de la comisión, el presidente de la comisión, que reconoció que se trataba de una "cuestión novedosa" en la que discurren dos derechos, el de las comisiones públicas y el del derecho a la imagen.
Y para certificar su identidad, con su DNI, acudió junto con la letrada de la comisión y la compareciente a un cuarto contiguo a la sala antes de reanudar la sesión.