De los 75 indicadores económicos que maneja la Cámara de Comercio, como el consumo, la inversión, el empleo o los precios, el 73% de ellos se comportan ahora incluso peor que en momentos críticos del proceso independentista como el referéndum del 1-O el año pasado.
Los empresarios creen que la situación política influye directamente en la economía, un tercio de ellos dice que esta situación puede empeorar y esto tendrá repercusiones en el ámbito laboral. Por ejemplo, el 8% opina que eso complicaría las relaciones entre los empleados de una plantilla.
Además, según esta encuesta de la Cámara de Comercio, casi el 40% cree que la incertidumbre afecta negativamente al emprendimiento: creación de nuevas empresas y apertura de nuevas tiendas.
Y el 8% asegura que se plantea salir de Cataluña si la tensión política se mantiene.