Este miércoles acudió a 'El Hormiguero' el actor y campeón de los pesos pesados, Hovik Keuchkerian, tras el estreno de la quinta temporada de 'La casa de papel' y aprovechó la entrevista junto a Pablo Motos para hablar del alcoholismo que lo acompañó durante un tiempo y cómo logró superarlo.
El actor explica que "hasta los 32 años no había bebido ni fumado nada", ya que se dedicaba en cuerpo y al alma al boxeo, hasta que dejó de practicar este deporte y vio que no tenía nada que hacer: "Lo jodido es la mañana siguiente porque el día es muy largo y al final no sabes que hacer".
Cuando comenzó a beber, relata, estaba "sin fuelle ni ganas de seguir", pero se pudo meter en un bucle de trabajo y "todo fue hacia arriba", aunque confiesa que pasó 2 o 3 años muy malos en los que "iba sin rumbo.
"El alcohol te lleva a aislarte en casa"
Gracias a comenzar la interpretación, "volvió a recuperar el foco", pero reconoce que se ha visto inmerso en "una montaña rusa de emociones" y donde el alcohol "es la puerta a pensar solo en ti y aislarte en casa".
Todo cambió cuando habló con su madre y le dijo todo lo que pensaba de él: "Me dijo que estaba gordo, tóxico, feo, que andaba encorvado y era un trozo de mierda". En ese momento, pensó mucho en ello y llegó a la conclusión que debía cambiar de vida: "No quería que cuando ella deje este mundo, se vaya pensando todas estas cosas sobre mí. Ahí pude cambiar".