La Fiscalía de Cáceres ha archivado la denuncia que interpuso la asociación Defensor del Paciente sobre el brote de legionela detectado en la capital cacereña el pasado mes de agosto, ya que no aprecia en las actuaciones indicios de delito penal.
En su escrito asegura que "resulta significativo que no se haya podido establecer un vínculo epidemiológico entre los casos confirmados y algún foco de infección", y destaca que los responsables sanitarios tomaron las decisiones oportunas.
Las diligencias se abrieron tras una denuncia presentada el pasado 30 de agosto por la citada asociación tras los casos de legionela que se detectaron en la ciudad, que han afectado a doce personas y han provocado la muerte de un hombre de 86 años.
Ante esta denuncia, la Fiscalía solicitó los informes sobre las causas del brote y los controles adoptados por la Dirección General de Salud Pública de Servicios Extremeño de Salud (SES) y otros organismos competentes.
Tras los primeros casos se tomaron muestras en fuentes públicas y sistemas de riegos tanto públicos como privados, así como en conducciones y sistemas de refrigeración de varios edificios administrativos, y se procedió a la clausura de las fuentes que dieron positivo para su desinfección.
Con todos los informes analizados por la Fiscalía se concluye que "no puede entenderse que exista delito, ni cometido contra la vida o integridad física de las personas, por imprudencia, ni tampoco un delito contra el medio ambiente", por lo que la denuncia ha sido archivada.