En la noche del jueves 17 de diciembre de 2020, Ars Creatio completó su programación del año que se despide. El grupo de actores de la asociación y las entidades colaboradoras pusieron en escena, sobre las tablas de un Teatro Municipal con el máximo aforo permitido —y con las invitaciones agotadas desde hacía días—, la obra de Jacinto Benavente Los intereses creados. Estrenada en otro mes de diciembre, el de 1907, con el tiempo se ha convertido en uno de los textos más representativos del teatro universal, como prueba su acogida tras los 113 años transcurridos. Dejó escrito Lázaro Carreter que el público sacaba en hombros al autor al término de varias de aquellas representaciones. Hoy, con las pasiones artísticas más calmadas —y la afición taurina muy menguada, todo sea dicho—, los entusiasmos se encauzan por distintos derroteros.
Como suele ocurrir en otros reconocidos libretos, nuestro prolífico premio Nobel también supo condensar, en una de las frases del protagonista, el mensaje —algunos dirían «recado»— principal: «Para salir adelante con todo, mejor que crear afectos es crear intereses». Si de tan demoledora afirmación hay algo que asuste más que su significado, sin duda es su plena vigencia.
Onda Cero Vega Baja
Vega Baja | (Publicado 18.12.2020 10:49 )
Al son del pícaro Crispín —admirable trabajo de Eliseo Pérez Gracia, que se desempeñó en la mayor responsabilidad— van danzando los demás personajes, atrapados de tal manera que actuarán para salvar a aquél de sus líos. Si en otros géneros literarios, incluido el teatro, finalmente el amor triunfa sobre cualquier adversidad, en esta obra se nos advierte de que sólo ha ocurrido así por mera conveniencia: si para satisfacer los intereses hubiera que fomentar un sentimiento perverso, todos —particulares o estamentos, por muy elevados que éstos se tengan— lo habrían hecho igualmente sin ningún miramiento. Por eso los clásicos nunca pasan de moda: porque cuentan las cosas sabidas desde siempre, pero de vez en cuando hay que recordarlas.
De esta manera, Ars Creatio concluye las actividades programadas que le ha dejado desarrollar el año que en buena hora se vaya. Entre las que permita 2021, la asociación cultural torrevejense, junto a quienes se animen a unirse a ella, desde el escenario o desde el patio de butacas, continuará ampliando su red de afectos..., cómo no, con la aquiescencia de don Jacinto.