Hoy con Leleman venía pensando en… la demostración de que el fútbol es de los aficionados. En eso y en el ridículo espantoso que han hecho algunos con eso de la “Superliga”.
Dijo Florentino que la Superliga llegaba para “salvar el fútbol”. Y fueron los aficionados ingleses los que realmente lo han salvado. El fútbol nació en Inglaterra y resucitó ayer en Inglaterra. Mis respetos a todos esos aficionados de los equipos del "big six" que salieron a la calle a manifestarse en contra de algo tan insolidario y egoísta como la creación de esa Superliga. Ellos sí entienden que el fútbol es y debe ser del pueblo. Con su presión obligaron a la salida de los equipos británicos e hirieron de muerte el proyecto.
Mis respetos a todos esos jugadores de los equipos implicados que fueron valientes y se mostraron contrarios a su creación. Lo fácil y cómodo para ellos hubiera sido alinearse con la decisión de los dueños de sus clubes y no lo hicieron. Ellos también entienden el significado del fútbol y sus palabras no cayeron en saco roto.
Y mis respetos a los clubes que dijeron NO pese a haber sido invitados como Borussia, Bayern, PSG o Sevilla. Otros cacarean eso del “equipo del pueblo” y en cuanto les invitan a comer en la mesa de los ricos se enfundan el traje y se olvidan del pueblo y sus raíces. Con el pueblo pero sin el pueblo.
Ah! Y ser contrario a la Superliga no es estar a favor de la UEFA o la FIFA esa que por motivos económicos se lleva el Mundial a Qatar, pero al menos cualquier equipo modesto puede soñar con jugar en sus competiciones y ganarlas. Porque el fútbol además de ser de los aficionados son sueños, esos que Florentino y alguno más quería arrebatar a los más humildes…
