AVA-ASAJA eleva las pérdidas del año agrario a 800 millones de euros –un 25% más que el año anterior– a causa de la subida sin precedentes de los costes de producción, las graves mermas de cosechas por la anomalía climática, la entrada masiva y sin reciprocidad de importaciones de terceros países, la falta de soluciones para combatir las plagas y enfermedades, los daños récord de la fauna salvaje y los robos en el medio rural.
Ante la crítica rentabilidad de los agricultores y ganaderos de la Comunitat Valenciana, AVA-ASAJA reclama a las administraciones “que se pongan las pilas” y una hoja de ruta que garantice una sostenibilidad no solo medioambiental, sino también económica.