El técnico no quiere confiarse

El Balonmano Benidorm se enfrenta a un rival que ya está descendido matemáticamente

El Benidorm tendrá en frente, cuando sólo quedan tres partidos para el final de la temporada, a un rival teóricamente más débil, pero hay que salir a la cancha con mentalidad de que es uno de los grandes

Antonio García Sancho

Marina Baixa | 14.05.2021 15:18

El Balonmano Benidorm recibe este sábado a las 18:00 horas al Blasgón Bodegas Ceres Villa de Aranda. Se trata de un equipo que ya lo tiene todo perdido porque está matemáticamente descendido una vez sonaba el pitido final de su encuentro de la pasada semana frente al Bidasoa. Sin embargo, el técnico de los de Benidorm, Fernando Latorre, no quiere confiarse demasiado porque, precisamente el hecho de que no tenga nada que perder va a hacer que los de Aranda "vengan sin ninguna presión". Por eso, asegura Latorre, "no será un fácil rival, todo lo contrario". El equipo de Villa de Aranda "es joven, pero ha puesto en problemas a muchos rivales" decía Latorre.

No obstante, el principal "handicap" de este equipo es su inexperiencia, que le ha llevado a "cometer errores, especialmente en los 15 minutos finales de algunos partidos" y eso les ha llevado a perder más de un partido.

En contrapartida, el Balonmano Benidorm llega diezmado por las lesiones y está esperando como agua de mayo llegar al final de la temporada. Para el partido contra el Villa de Aranda son bajas seguras Mario López, Carlos Grau con un pinchazo y Leo Tercariol que continua recuperándose de una luxación en un dedo de la mano derecha; y sigue siendo duda Josep Folques, que no acaba de reponerse de su esguince.

Fernando Latorre nos comentaba en la previa que: “si salimos con la mentalidad de que está todo hecho, lo pasaremos mal y perderemos" Aranda basa su juego en la defensa que es bastante fuerte y ordenado y Latorre es consciente de que las bajas pueden pasar factura, aunque el resto del equipo "está respondiendo bien"

El partido estará dirigido por las colegiadas Lorena García Gil y Tania Rodríguez Estévez, del colegio aragonés y valenciano respectivamente.