La Generalitat continúa realizando controles en las principales localidades turísticas de la Comunitat para que se eviten las aglomeraciones y así, la propagación del coronavirus.
En la provincia de Castellón se han inspeccionado un total de 32 establecimientos y de ellos, la Policía autonómica propone sancionar a 14.
Además, en concreto en la capital de la Plana, se ha propuesto sancionar a varios locales por ser "numerosos los camareros que trabajaban sin la mascarilla obligatoria", según explican desde la Generalitat.
La consellera de Justicia y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha puesto en valor la actuación de los agentes y hace un llamamiento a la responsabilidad de los ciudadanos para hacer frente a la pandemia.