CON JUAN LOZOYA

'Con las Orejas Tiesas': No nos quedarán ni las migajas

Cada lunes, la opinión de Juan Lozoya en Onda Cero Castellón.

Onda Cero Castellón

Madrid | 06.11.2023 13:57

La Comunitat Valenciana y Castellón llevan casi dos décadas ni pintar un pimiento a nivel nacional ni, mucho menos, a nivel de la Unión Europea… ¡y así nos va!

Les aseguro que estos últimos días leo las noticias que nos llegan de los acuerdos de investidura para ungir de nuevo al presidente del Gobierno ‘ojiplático’, que diría Vicent Sales… y eso que pese a en su dilatada experiencia política no se las ha tenido que ver, ni mucho menos, con trágalas de este calibre.

Todos teníamos claro que la factura a pagar a los partidos independentistas catalanes por sus ridículos 14 diputados, si los comparamos con los que tenían y sabiendo que apenas son el 4% de los 350 diputados que hay en el Congreso. Y es que, de 23 escaños que tenían la pasada legislatura, hace tres meses y medio bajaron a apenas 14 entre los dos con solo el 3,5% de los votos a nivel nacional. Y, pese a todo eso, tienen la sartén por el mango y toda España bailamos al son que tocan… y además tenemos que estar agradecidos.

¿No es para joderse? Lo que todos sospechábamos ya se empieza a consumar, aunque aún no se ha cerrado del todo por los celos que tienen entre los dos partidos y líderes nacionalistas catalanes. Lo único que les une es el odio a España y tener cada uno su pesebrito de poder y sus sueldos garantizados, en el resto son absolutamente diferentes.

De momento, gracias a ERC y a Pedro Sánchez, por supuesto tienen atada la amnistía para todas las personas que han delinquido la última década a costa de las fechorías e ilegalidades cometidas la última década. Incluso este viernes la Audiencia Nacional ha anunciado que sentará en el banquillo de los acusados a 12 miembros de los Comités de Defensa de la República para juzgarles por delitos de terrorismo nada menos… Y nada más.

Porque con el pacto de nuestro excelso, reverendísimo y magnánimo presidente del Gobierno será todo lo que tengan que hacer porque, aunque les condenen por terrorismo nada menos, saldrán de rositas a la calle, si es que entran en la cárcel. Pero solo ellos, si cualquiera de ustedes tiene alguna causa judicial pendiente, aunque sea por una infracción de tráfico, sepan que les caerá encima todo el peso de la ley. Pero es que, además, ya les han cedido la gestión de las Rodalias. No es que me parezca mal en sí, porque se trata de un servicio público que siempre es deficitario. El problema es que además todos los castellonenses contribuiremos a financiar su déficit, ya lo verán.

Y para rematar, Pedro Sánchez les condona 15.000 millones de euros de deuda por la cara, cuando Cataluña es ejemplo palmario de gestión nefasta los últimos años. Es la comunidad autónoma que más deuda acumula, especialmente los últimos años. Y eso que la Generalitat de Cataluña sangra a base de impuestos a sus vecinos más que ninguna otra autonomía de España.

Y todo ello es solamente la factura para que el PSOE sume los siete votos de Esquerra Republicana de Cataluña. Bueno, todo ello y más que seguro que no sabemos aún, pero que nos enteraremos cuando nos la metan doblada a la vuelta de cualquier esquina. Porque si el Gobierno destaca por algo es por su transparencia, básicamente por su ausencia absoluta. Ahora falta la factura de Carles Puigdemont por el voto de sus diputados. Y tanto ustedes como yo sabemos que no van a ser baratos ni mucho menos.

El problema es que el excelso Pedro Sánchez solamente la podrá pagar a costa de seguir sangrando al resto de los españoles a base de impuestos y con infrafinanciación para, entre otros, la provincia de Castellón. Estos días han seguido negociando, por su puesto a espaldas de los ciudadanos españoles y con absoluto ocultismo, opacidad, alevosía y nocturnidad. Y no hay que ser un lince para saber dos cosas. La primera, que Carles Puigdemont está terminando de tejer su telaraña para atrapar todo lo que pueda en esta negociación indecente.

No es cuestión de que sea democrático o no, se trata de que no es ético negociar en los términos en los que está planteado. Y es que si Esquerra Repúblicana de Cataluña ha vendido como éxito propio, de cara a las elecciones catalanas del año que viene, la amnistía, las Rodalías y los primeros 15.000 millones de condonación de deuda del FLA, Junts tiene que doblar su apuesta y lograr mucho más si no quiere quedarse como plato de segunda mesa.

Y la segunda, que Carles Puigdemont va a hacer pagar muy muy caro a todos los castellonenses, igual que al resto de españoles, el apoyo de sus siete diputados en la sesión de investidura de Pedro Sánchez. Porque al todavía presidente en funciones nada le importa más que seguir siendo presidente, aunque sea pisoteando no solo a cada provincia de este país, sino la historia y la tradición democrática del PSOE. Lo dicho, no nos quedarán ni las migajas después del banquete que se van a pegar en Cataluña a costa de todos los españoles, gracias a la generosidad interesada de un Pedro Sánchez que, como ya decía la semana pasada, está dispuesto a invitar a todo lo que haga falta con nuestro dinero.

De todas formas, no hagan mucho caso… que es solo mi opinión.