Moliner ha tomado esta decisión "consciente" de la situación actual, "que obliga a priorizar los recursos", y ha dicho que su responsabilidad "es hacer el esfuerzo en lo más importante, y seguro que los alcaldes entienden que la Diputación no les pueda invitar a cenar si con ese dinero se pueden solucionar problemas más urgentes en varios municipios".
En cualquier caso, el presidente de la Diputación ha asegurado que su compromiso y el de la Diputación con las fiestas de la Magdalena es "firme", por lo que están trabajando en otra fórmula que no sea "tan costosa" para homenajear a los 135 municipios de la provincia. Esta cena con espectáculo reúne a más de 1.500 personas, incluidos alcaldes y concejales de toda la provincia, tras participar en el Pregó de las Fiestas de la Magdalena.
Moliner ha señalado que esta decisión se enmarca dentro de la política de "ahorro y austeridad" que se han marcado como uno de los "ejes" de la corporación. Según ha apuntado, no tiene sentido que los ciudadanos estén realizando un importante esfuerzo en materia económica y no se "predique" con el ejemplo desde las administraciones públicas".
Al respecto, ha añadido que todas las decisiones que se tomen deben estar guiadas por la "austeridad y el sentido común" pero, sobre todo, por "la responsabilidad y la generación de posibilidades de crecimiento".
Actualmente se está ultimando la redacción de los presupuestos de la Diputación de cara a 2012, para los que el presidente ha exigido a todos sus diputados que extremen el control para racionalizar los recortes. "No se tratar de ver quién recorta más, sino de que se priorice buscando la máxima rentabilidad en la inversión", ha asegurado.