A sus casi 36 años Etienne Capoue se marcha del Villarreal tras tres temporadas y media y con un rendimiento que llegó a ser sobresaliente en su primeras campañas. El galo llegó como refuerzo invernal tras la lesión de Iborra en la temporada 20/21 y, con Unai Emery en el banquillo, pronto se convirtió en una pieza fundamental del engranaje del submarino. Su actuación en la final de la Europa League en Gdansk y ante el United, donde fue nombrado MVP, quedan ya en la historia del club castellonense.
Con el técnico vasco repetiría un extraordinaria actuación en la temporada 21/22, en la que los amarillos alcanzaron las semifinales de la liga de campeones. Pero su estrella se fue apagando tras la marcha de Emery y con la llegada de Setién, con cuyo nuevo rol nunca se sintió cómodo sobre le terreno de juego. Posteriormente con Pacheta y Marcelino, ya no volvería a alcanzar su mejor versión.
Un ídolo para la grada
Pero de lo que no cabe duda es de que Capoue ha dejado una honda huella entre los aficionados amarillos por su carácter desenfadado y bromista. El galo nunca escondió que se trataba de un jugador diferente y al que no le gustaba el fútbol: "Nunca veo fútbol , a mí lo que me gusta es el baloncesto pero mi padre me obligó a decantarme por el fútbol. Cuando mi hijo quiere ver un partido me siento con él pero disimuladamente miro el móvil", confesaba en una entrevista a Onda Cero .
De la misma forma no le dolían prendas para confesar que cuando fichó por el Villarreal, sólo conocía a Coquelin "porque era francés y había jugado contra él". El futbolista abandona el "submarino" con 148 partidos a sus espaldas y 12 goles . Si marcha es la segunda confirmada tras la de Pepe Reina y no será la última. Jugadores como Coquelin , Alberto Moreno o Morales tampoco continuarán .