Bares y restaurantes le ven las orejas al lobo. La declaración del Estado de alarma por parte de gobierno y el toque de queda en la Comunidad Valenciana, dicen, retrotraerá el consumo y aumentará la dificultad para echar adelante sus negocios. Piden que seamos más europeos en aquello de cenar un poco más pronto. Hoy jornada de adaptación a la nueva realidad y las autoridades sanitarias reconocen que la subida de contagios está poniendo al límite la capacidad de rastreo. Se masca la segunda oleada y los médicos de Castellón piden que no se abandone a los pacientes no COVID.