UGT y CCOO han instado a seguir avanzando en la mejora de la legislación laboral, protegiendo el contrato de trabajo, repartiendo márgenes empresariales, seguir mejorando empleo y salarios, reducir jornada y cuidar a la clase trabajadora.
Asimismo, los sindicatos mayoritarios, han hecho un llamamiento a racionalizar las discrepancias legítimas entre los partidos, para emprender los consensos necesarios ante las reformas, retos y desafíos que tenemos por delante, rebajando el tono de crispación política que limita gravemente la capacidad de dar respuesta a los verdaderos problemas de la ciudadanía.
Para Pepe Esteve, secretario de organización comarcal de UGT-PV, “necesitamos una apuesta decidida por el empleo pleno y mejorar el marco regulatorio en el que se genere el empleo del futuro. En este contexto, el proceso de digitalización y la inteligencia artificial han de hacer más productivas nuestras empresas para trabajar menos tiempo, pero en mejores condiciones. Es el momento de la reducción legal de la jornada de trabajo, proteger el contrato de trabajo a través de una nueva regulación del despido. Es vital proteger a quienes generan la riqueza a través de su fuerza productiva: la clase trabajadora”
Esteve resalta que “la apuesta por la subida de los salarios ha sido compatible con una recuperación del empleo virtuosa en términos cualitativos y cuantitativos. El SMI es hoy un 54% superior al que teníamos en el 2018”
Para Andrés Bermejo, secretario general comarcal de CCOO-PV, “hay que impulsar la política industrial y de desarrollo sectorial. Las transformaciones productivas, la digitalización aplicada a los procesos de generación de bienes y servicios y particularmente la transición energético-ecológica, definen un panorama complejo y no exento de riesgos, pero también de oportunidades. Por ello, junto a la mejora de la calidad en nuestros sectores tradicionales del turismo y la agricultura, debemos aspirar también a ser un polo industrial aprovechando el potencial de las energías renovables a precio competitivo y que genere empleo de calidad.”
Bermejo destaca que “en el año 2023, el porcentaje de contratos indefinidos han supuesto, en general, el 42’99% del total, fruto de la reforma laboral pactada entre Gobierno, empresarios y sindicatos en 2021”
Ambos dirigentes sindicales, en Más de uno la Ribera, han emplazado a los trabajadores de la comarca a participar de las movilizaciones este 1 de mayo, para reivindicar la reducción de la jornada laboral y mejores salarios.
EN LO POSITIVO: CONTINÚA LA TENDENCIA A MÁS EMPLEO, MÁS EMPRESAS, MENOS TEMPORALIDAD Y MÁS CONTRATACIÓN INDEFINIDA
La evolución del empleo en la Ribera, en términos de volumen de cotizantes a la seguridad social en el régimen general, sigue teniendo un buen comportamiento en general, a pesar de las incertidumbres del contexto económico global. Así, la comarca de la Ribera registra 78914 cotizantes en el primer trimestre del año, una cifra que implica el número más elevado de cotizantes en los últimos 12 años para dicho trimestre, desde que existen estadísticas desglosadas para el territorio comarcal.
El indicador del número de empresas en la Ribera alcanza en el primer trimestre una cifra de 7886, el mayor número de mercantiles en los últimos cinco años y 4 más que hace un año, si bien es cierto que se produce una ralentización en en crecimiento respecto al ritmo de los años anteriores. Por otra parte cabe señalar que el comportamiento en la evolución del número de empresas mantiene la estabilidad en todos los tramos de los diferentes tamaños de empresa, sin que existan desequilibrios apreciables entre la pequeña empresa y las de mayor tamaño.
El empleo, además, evoluciona en sentido positivo, ya que todos los tramos de tamaño de empresa, tanto la microempresa, como la pequeña y la gran empresa, ocupan plantillas más numerosas que hace un año.
El impacto de la reforma laboral sobre la temporalidad en la comarca de la Ribera sigue teniendo un impulso positivo. Además del drástico descenso del primer año que rebajó la temporalidad desde el 22,63 % de los cotizantes en el primer trimestre de 2022 hasta el 10,49 % de 2023, en el primer trimestre de 2024 se ha vuelto a registrar un nuevo descenso que sitúa la temporalidad en la comarca en el 9,54. Los indefinidos, en consecuencia, suponen en este momento el 90,46 % de los cotizantes en la Ribera.
Igualmente debe destacarse que, aunque debe valorarse positivamente la evolución favorable de todas las modalidades de contratación estable en la Ribera, el crecimiento de las modalidades de contrato fijo -discontinuo e indefinido a tiempo parcial no impide un avance muy significativo del número de cotizantes con contrato indefinido a tiempo total. Así, si en el primer trimestre de 2022 el porcentaje de los indefinidos a tiempo completo en la comarca era del 59,02%, el año pasado había pasado a ser el 65,89 % y en el primer trimestre de este año el porcentaje se ha situado en el 66,41%, con lo cual puede afirmarse que la calidad del empleo ha mejorado sustancialmente.
EN LO NEGATIVO O CON MEJORAS INSUFICIENTES: LA BRECHA DE GÉNERO, LOS SALARIOS Y LA SINIESTRALIDAD LABORAL
Aunque se producen mejoras en la situación de las mujeres en el mercado laboral, las brechas de género siguen existiendo de forma muy evidente. Así, el porcentaje de mujeres entre los cotizantes a la seguridad social en la Ribera se queda en un 38,43 %. Por otra parte, aunque la la evolución de la temporalidad para las mujeres es también positiva, existe claramente una brecha por sexos y resulta necesario seguir insistiendo en las políticas de igualdad. En este sentido, la tasa de temporalidad femenina en la Ribera se ha situado en el primer trimestre de 2024 en el 11,98 %, mientras que la masculina registra el 7,91 %, esto es, una brecha superior a los 4 puntos.
En lo referente a los salarios, y a pesar de que la estimación sindical del impacto del incremento del salario mínimo a 1134 euros alcanzaría en la Ribera a una horquilla de entre 12,000 a 14,000 trabajadores, los salarios siguen siendo uno de los puntos débiles en la evolución de las condiciones de trabajo.
De este modo, los convenios firmados en el inicio del año en el ámbito autonómico registraron una subida media del 2,61%, lo que supone un punto menos que el incremento interanual del IPC, que se situaba en el 3,61%, alejándose de la recomendación acordada por el acuerdo de negociación colectiva que establecía incrementos salariales del 4 % y generando perdidas de poder adquisitivo para los trabajadores.
En cuanto a la siniestralidad laboral, si bien no hay registro comarcalizado de accidentes de trabajo, la estadística oficial de la Generalitat Valenciana indica que los índices de incidencia (número de accidentes por cada 100 mil trabajadores) en 2.671,09 para el total de accidentes y en 21,26 para los accidentes graves. Una estimación realizada en base al dicho índice de incidencia provincial implicaría que en la Ribera se habrían producido un total de 2018 accidentes de trabajo y 17 accidentes graves en el último año. Además, y por desgracia, tenemos que lamentar también accidentes mortales en la comarca que deberían haberse evitado.
