Jordi, de 14 años, empezó hace dos años a atragantarse mientras comía, al principio pasaba de vez en cuando, aunque al poco tiempo ya no podía comer normal, necesitaba una botella de 2 litros agua para ayudarse y adelgazó muchísimo, ha contado esta mañana en la presentación del caso, en el hospital Pûerta de Hierro. El paciente cuenta que empezaron a hacerle pruebas y le diagnosticaron acalasia tipo II, un trastorno que provoca dificultad severa para ingerir alimentos sólidos y líquidos. En el mes de junio profesionales del Servicio de Digestivo del Hospital Puerta de Hierro y cirujanos pediátricos del Hospital La Paz, efectuaron en consulta una valoración inicial.
Después de varias reuniones preparatorias, el procedimiento se llevó a cabo, sin incidencias, el pasado mes de noviembre, a cargo de profesionales del Servicio de Aparato Digestivo del Puerta de Hierro, con el soporte y apoyo de cirujanos pediátricos de La Paz. Jordi recibió el alta a los tres días, tolerando ya en ese momento una dieta triturada. Posteriormente, ya en su domicilio, continuó progresando y, en la actualidad, ingiere todo tipo de alimentos, sólidos y líquidos, con total normalidad.
"Ha sido como si me hubieran dado una nueva vida"
Jordi no podía llevar una vida normal, "en las clases de deporte del instituto me notaba super cansado, no tenía energía porque comía muy poco." explica "por las noches me despertaba atragantándome, no podía casi ni respirar", de hecho los meses previos a la intervención sólo podía alimentarse de batidos. El joven cuenta que desde el primer contacto que tuvo con los médicos de la sanidad madrileña se sintió muy seguro "desde la primera charla que tuvimos en La Paz tuve un montón de confianza con vosotros por cómo me tratasteis, cómo hablabais" explica "supe que este era el sitio donde tenía que venir". Después de operarle tuvo que pasar 24 horas en la UCI, pero al día siguiente ya pudo empezar a beber agua y a las 72 horas alimentos triturados. A los diez días llegó la normalidad y Jordi pudo comer la hamburguesa que llevaba tanto tiempo esperando,. "ese día comí hamburguesa y cené paella" explica sonriente a los periodistas
Técnica ednoscópica POEM
La técnica empleada en esta intervención denominada POEM (del inglés Per-Oral Endoscopic Miotomy), consiste en hacer un corte extenso de la capa muscular del esófago y previa realización de un túnel en la capa intermedia de la pared esofágica. El procedimiento se realiza exclusivamente por endoscopia bajo anestesia general. Al no requerir cirugía alguna, permite una recuperación del paciente a su vida normal en 48 horas. “Este es el objetivo último que nos mueve a todos. Trabajar en equipo para ayudar a vivir mejor a las personas, sanar la enfermedad. Y hacerlo con diagnósticos más tempranos, técnicas menos invasivas y a través de terapias más personalizadas que potencien el éxito de cada tratamiento, que curen mejor, y ofrezcan nuevas alternativas a quienes todavía no podemos curar. No solo para los madrileños, sino para más de 160.000 pacientes que recibimos cada año de fuera de nuestra región, 30.000 de ellos con tratamientos de primer nivel y altísima complejidad”, ha declarado la consejera de Sanidad, Fátima Matute, que ha participado en la presentación. “Se trata de una absoluta novedad terapéutica, de las que tenemos muy pocos precedentes en la literatura científica de su aplicación a niños”