Desde el inicio de la epidemia, en las residencias aragonesas se han registrado 1.026 casos de coronavirus, 243 hospitalizaciones y 304 muertes. Esto supone que tres de cada cuatro fallecidos por esta enfermedad en nuestra Comunidad Autónoma, eran ancianos que vivían en estos centros.
El Gobierno ha reforzado las plantillas a través de una bolsa de empleo que ha recibido más de 3.000 candidaturas, y cada semana va a distribuir a las residencias 51.000 mascarillas y 45.000 pares de guantes, entre otros materiales.
El gerente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales, Joaquín Santos, cree que la medida más importante ha sido la creación de los denominados “centros covid”, a los que derivan ancianos con coronavirus para aliviar la carga de trabajo en las residencias. Esos centros suman unas 350 plazas, de las cuales tienen libres 165.
Santos señala que en el conjunto de residencias ya hay 78 personas que se han curado y la situación empieza a estabilizarse.