Las aguas del Ebro comienzan a volver a su cauce después de la crecida del río, sin embargo, todavía habrá que esperar unos días a que baje el nivel del agua para comenzar a evaluar los daños. Una primera estimación apunta a que el Ebro ha anegado más de 12.000 hectáreas de cultivo, cerca de 300 personas han tenido que desalojar sus viviendas y el Ebro ha causado importantes daños en explotaciones ganaderas.
Por otra parte, muevo repunte de contagios en esta séptima ola de la pandemia en Aragón. La tasa de incidencia se dispara hasta los 758 casos por 100.000 habitantes en los últimos quince días. El Departamento de Sanidad confía en que la curva alcance la semana que viene.