La Real Sociedad se lleva dos goles de renta para el partido de vuelta de octavos de final de la Copa ante el Villarreal, que sigue vivo en esta ronda gracias a un espectacular gol de Manu Trigueros desde cuarenta metros para hacer el 3-1. El conjunto donostiarra dominó con comodidad en la primera parte a un Villarreal que parecía tener una marcha menos y que no llegó en ninguna ocasión con verdadero peligro a la portería de Rulli.
La Real encontró pronto el gol que desencallaría el encuentro, cuando en el minuto 16 Willian José hizo bueno un pase de Oyarzabal con una preciosa definición ante la salida de Asenjo. El Villarreal tampoco despertó con el gol realista, siguió lento y predecible, con algún chispazo de Trigueros, hasta que llegó el segundo gol en un regalo inusual en la alta competición.
Un balón sin peligro aparente lo despejó José Ángel hacia el área pequeña, donde se encontraba Mario y salía Asenjo, pero su falta de entendimiento dejó el balón a los pies de Carlos Vela, que sólo tuvo que empujar a la red ante la incredulidad de Fran Escribá en el banquillo amarillo. Se movió mucho el partido en la segunda mitad, en la que el Villarreal siguió amagando sin pegar y los vascos mostraban su gran peligro en varias contras en las que pudieron marcar el tercero, en un centro de Carlos Vela y un cabezazo de Willian José que sacaron entre Asenjo y el larguero.
Llegaría este tercer gol a diecisiete minutos para el final, en una gran acción individual de Oyarzabal que quebró a Musacchio y lanzó un misil con la zurda para desbordar a Asenjo. El Villarreal lo tenía todo perdido pero en el tramo postrero del partido logró el gran gol de Trigueros, que remató casi desde el medio campo y batió por alto a un sorprendido Rulli dándole así vida a su equipo para la vuelta.