No fue la mejor versión del Real Madrid, pero los de Zidane sumaron tres puntos que les permiten seguir al frente de la Liga con una hoja de servicios inmaculada: cuatro partidos y cuatro victorias. James y Benzema fueron los autores de los goles. Sergio Ramos jugó con fuego y sólo la falta de vista del colegiado evitó su expulsión antes del descanso.
Al igual que contra el Sporting de Portugal el pasado miércoles, al Rea Madrid le costó imponer llevar el control del partido. Esta vez no tuvieron que acudir a la épica del último minuto, pero si a un jugador que hasta hace poco parecía condenado al banquillo. James fue el mejor en Cornellá y el encargado de desatascar el partido cuando los jugadores ya cogían el rumbo de los vestuarios.
El Madrid se fue al descanso con un gol que le evitó jugar sin grandes sofocos en el segundo acto. Y eso que se pudieron complicar más las cosas para los de Zidane. Sergio Ramos pudo ver perfectamente la segunda amarilla y la expulsión al cortar un disparo del Espanyol con la mano.
En la segunda parte si se vio a un Real Madrid más cómodo y con control sobre el equipo de Sánchez Flores. Fruto de ese dominio llegó el segundo gol, obra de Benzema. El francés cazó un centro medido de lucas Vázquez en el corazón del área para batir a Diego López y encarrilar el partido y la victoria.
Quique Sánchez Flores sacó a Caicedo en busca de la remontada, pero el Real Madrid supo sujetar los ímpetus del cuadro local hasta el pitido final.
El Real Madrid sigue líder y este miércoles jugará ante el Villarreal sabiendo que Barcelona y Atlético, sus dos rivales por el título, se miden en el Camp Nou.