Después de la victoria en la Liga de Campeones ante el Galatasaray (0-2), revitalizadora tras la derrota 1-2 contra el Barcelona, el equipo rojiblanco retoma la Liga con un encuentro clave, sobre todo por las obligación de triunfo que exige su actual sexta posición y más aún su desventaja de tres puntos con el líder.
"Nos vamos a encontrar con un equipo rápido con intención de seguramente dejarnos la pelota para poder robar y atacar", avanzó este viernes el argentino Diego Simeone, cuyo conjunto alcanza el cuarto partido oficial del curso con el único borrón del 1-2 contra el Barça y con dos triunfos solventes en sus dos salidas previas.
Ganó al Sevilla con rotundidad (0-3), sobre todo en el primer tiempo, y también al Galatasaray (0-2), con una muy buena media hora inicial, antes de desplazarse a Ipurúa con la misma fórmula ofensiva por nombres que en Turquía, con Jackson Martínez y Vietto en la delantera y con Griezmann, de inicio, escorado a la izquierda. Ese es el ataque que se prevé en el conjunto rojiblanco, según las pruebas del entrenador tanto el jueves como el viernes.