POR LA INESTABILIDAD DEL MERCADO ASIÁTICO

El Ibex 35 cierra su peor mes desde mayo de 2012 con una caída del 8,24%

La bolsa española ha perdido este lunes el 0,91 por ciento y ha vuelto a registrar pérdidas respecto al cierre del ejercicio pasado perjudicada por la caída de las plazas internacionales y de la banca, según datos del mercado.

ondacero.es

Madrid | 31.08.2015 18:35

Panel con el principal indicador de la bolsa española, el IBEX 35
Panel con el principal indicador de la bolsa española, el IBEX 35 | antena3.com

La bolsa española ha vivido una nueva jornada de pérdidas. El Ibex 35 ha cerrado la sesión de este lunes con una caída del 0,91%, lo que ha llevado al selectivo a permanecer por debajo de los 10.300 enteros (10.259) y a firmar su peor mes de agosto desde mayo de 2012, al acumular un retroceso del 8,24%. En el mercado de deuda, la prima de riesgo se ha colocado en 131,2 puntos básicos, con la rentabilidad del bono a diez años en el 2,104%. Mientras, en el mercado de divisas, el euro se intercambiaba a 1,1199 dólares.

ArcelorMittal se ha erigido como el 'farolillo rojo' de la sesión, con un recorte del 4,29%, seguido de Repsol (-3,44%), OHL (-3,21%), Sacyr (-2,11%) y Gas Natural (-1,89%). Por el contrario, Abengoa se ha consolidado como el mejor valor de la jornada con un repunte del 3,9% tras adjudicarse un contrato en Uruguay por 11,59 millones de euros. Indra, con un avance del 1,14%, IAG (+0,86%), Aena (+0,58%) y Amadeus (+0,53%) han completado el ranking de subidas.

Salvo Endesa, que ha conseguido ganar un 0,5%, el resto de los 'pesos pesados' del selectivo han terminado la sesión en 'números rojos', con Repsol a la cabeza. Santander ha perdido un 1,86%, BBVA un 1,13%, Telefónica un 1,06%, Inditex un 0,4% e Iberdrola un 0,09%.

Con Londres cerrado por festivo, las principales plazas europeas también han terminado el mes de agosto en negativo: París ha recortado un 1% y Francfort un 0,88%.

La crisis bursátil generada por las dudas sobre el crecimiento de China ha pasado factura al Ibex, que cierra agosto con una caída del 8,24%, su peor dato mensual desde mayo de 2012. La mayoría de los valores del selectivo español ha acumulado pérdidas en agosto, con Abengoa a la cabeza (-46,7%) debido a la gran volatilidad que ha sufrido tras anunciar su ampliación de capital. También han registrado importantes caídas OHL (-19,5%), Repsol (-17,3%) FCC (-15,7%) y ArcelorMittal (-15,3%). La excepción ha sido Aena, que ha conseguido repuntar un 1,8%, debido, fundamentalmente, a su estructura accionarial.

"La gran mayoría de las acciones de la compañía no están a la venta. No solo el 51% propiedad de España no presiona a la baja el precio, sino que gran parte de los fondos que acudieron a la OPV lo hicieron con un horizonte temporal de largo plazo y no han tenido por qué vender sus paquetes accionariales", ha explicado a Europa Press el analista de XTB Jaime Díez. De esta manera, Aena tiene en el mercado una menor cantidad de acciones que puedan hundir los precios y, sin embargo, "facilitan las subidas cuando entra una cantidad de dinero aceptable".

El analista de XTB Rodrigo García ha señalado a Europa Press que aunque normalmente el mes de agosto suele caracterizarse por ser "poco volátil y falto de emociones", en los últimos ejercicios se está rompiendo con esta tradición. En este caso, la fuerte volatilidad en China, acompañada de caídas en los principales mercados asiáticos, han trasladado a los parqués mundiales la presión vendedora. Tampoco ha ayudado la continuación de las caídas de materias primas, muchas de ellas en mínimos de la década, así como la incertidumbre en los países emergentes.

Así, el Ibex ha cerrado el mes de agosto a unos niveles un 9% inferiores al cierre del mes de julio, "siendo una de las bolsas europeas que peor lo ha pasado durante el mes estival", según ha apuntado García. "Esta situación contrasta con la del año pasado, en la que el selectivo español se anotaba una subida de más de un 1%, eso sí, dejando unos niveles de volatilidad parecidos", ha añadido el analista, cuando la incertidumbre sobre la finalización de la expansión cuantitativa en Estados Unidos y la decepción del BCE tras declinar compras de deuda centraron los movimientos en los mercados.