EL INDULTADO DE RUBÉN AMÓN

Rubén Amón indulta a la Reina Sofía: "No se le han conocido ni errores ni deslices"

Sorprende que la reina Sofía cumpla hoy 80 años, sobre todo porque no los aparenta. Se ha instalado en una suerte de intemporalidad. Nunca fue demasiado joven, es verdad. Ni ahora parece mayor. Un pacto mefistofélico con el tiempo y con el espacio que predisponen el gesto de la mano saludando y la sonrisa dilatada, más o menos como si la dramaturgia personal y el mismo peinado representaran un rito contra la adversidad.

Rubén Amón | @Ruben_Amon

Madrid | 02.11.2018 09:50

Los ha conocido en casa la reina de picas, pero la intemporalidad de Sofía de Grecia y Dinamarca -he aquí sus galones- representa también la idea de estabilidad, de la constancia, cuando no de la resignación, frente a la provisionalidad de los cambios. Hija de reyes. Esposa de rey. Madre de rey. Y abuela de reina, si es que Leonor accede al trono con la inercia constitucional que le proporcionó su primer discurso público, el pasado.

No se le han conocido a la reina Sofía errores ni deslices. O ninguno más relevante que las discrepancias con la nuera Letizia en la tutela de las nietas, de forma que la mujer del rey Juan Carlos, en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la desdicha, ha transitado en una suerte de camino de perfección gregario.

La tarea ha requerido paciencia, frustraciones y alguna que otra humillación, sobre todo cuando empezaron a amontonarse los escándalos de la familia política -el divorcio de la infanta Elena y Jaime Marichalar, el juicio y condena de Urdangarín- y cuando la inmunidad informativa que protegía al rey se vio comprometida por el escándalo de la cacería africana a la vera de Corinna.

Terminó abdicando la reina con el rey para ubicarse en la posición de emérita y para establecer distancias conyugales. Oficialmente juntos, oficiosamente separados, Sofía viene descrita por la periodista Carmen Enríquez como una mujer "sensible, impuntual y divertida". Y como una leona herida en la protección de sus hijos, aunque la versión más despiadada y acaso vengativa de Jaime Peñafiel concluye que "Sofía ha fracasado como madre, como abuela y como mujer" por no haberse atrevido a sublevarse de las injusticias que la rodeaban. ¿Podía haberlo hecho?