EN LA BRÚJULA

El monólogo de las ocho: "El Gobierno no ha sabido reaccionar y ha asistido con una inmoral pasividad"

Rafa Latorre reflexiona en su monólogo sobre el cara a cara de Sánchez y Feijóo.

Rafa Latorre

Madrid | 16.05.2023 20:24

No había demasiada esperanza de que ocurriera, pero a veces conviene hacer preguntas solo para constatar que no se ofrece una respuesta. Y eso ya consta en las actas del Senado. Hasta en cuatro ocasiones le ha preguntado Alberto Núñez Feijóo a Pedro Sánchez si iba a romper su alianza parlamentaria con Bildu.

No sólo eludió en las cuatro ocasiones la respuesta, sino que la sustituyó por acusaciones. Como que el PP había hecho lo imposible para evitar el fin de ETA. Luego dicen del aprovechamiento. Ni el PSOE acabó con ETA ni el PP hizo lo imposible por evitarlo. Eso es sencillamente mentira, una mentira venenosa, por cuanto malversa cuánto hubo de sacrificio personal, de lucha policial y de lucha legal para acabar con el terrorismo. ¿O es que acaso nada tuvo que ver la persecución del brazo político de ETA? Pero, Sánchez no se quedó ahí en su hedionda prospección histórica, porque ha llegado a echar mano del 11M, que es algo que a Feijóo le cae tan lejos, más o menos, como a Pedro Sánchez, Rubalcaba.

Porque ya que hace memoria de Rubalcaba quizás convenga recordar lo que opinaba de las costuras del Frankenstein. El problema es que la sesión de hoy en el Senado ha evidenciado que la alianza parlamentaria de este Gobierno con Bildu permanece igual de estable que antes de que presentara una lista para estos comicios trufada de colaboradores de ETA.

Conste que de esas listas no van a desaparecer los siete asesinos condenados. Lo que ha prometido Arnaldo Otegi es que en caso de resultar elegidos no recogerán el acta de concejal. Oh, qué magnanimidad. Encima habrá que elogiarles su generosidad. Una estrategia de aprovechamiento total. Todo beneficio.

Los siete asesinos de ETA no recogerán su acta, pero esto no ha ocurrido porque sus socios del PSOE se lo hayan pedido, siquiera porque les hayan amenazado con romper los acuerdos parlamentarios que mantienen con ellos, no. Porque el PSOE lo más que ha hecho es reconvenirles tímidamente por su falta de decencia. Como si en lugar de atentar contra personas, hubieran atentado contras las buenas costumbres. Como escuchamos hoy en el Senado ha sido mucho más duro el Gobierno con quien ha denunciado la presencia de etarras en las listas de Bildu que con quien los ha puesto ahí. Comparen ustedes el grosor del reproche a unos y a otros.

Quien ha traído a ETA a la campaña electoral ha sido EH Bildu presentando a etarras en sus listas. Y quien lo ha denunciado ha sido COVITE, no los partidos políticos

COVITE, el Colectivo de Víctimas del Terrorismo, ha sido en esto de una claridad deslumbrante. En este sentido, desde COVITE han criticado que todos los miembros del Gobierno hayan tardado días en denunciar la ignominia de las listas electorales de EH Bildu, y que cuando lo han hecho, hayan aprovechado para atacar a los partidos de la derecha por traer a ETA a la campaña electoral. "Quien ha traído a ETA a la campaña electoral ha sido EH Bildu presentando a etarras en sus listas. Y quien lo ha denunciado ha sido COVITE, no los partidos políticos". Por si no ha quedado suficientemente claro, lo explica muy bien Consuelo Ordóñez que es la presidenta de COVITE.

Aquí hay dos cuestiones que destrozan a cualquier Gobierno. La primera es que pase lo que pase, presente las listas que presente, la alianza parlamentaria con Bildu tiene que continuar, porque a ella ha atado su destino Pedro Sánchez. No hay más y por eso es mucho más agresivo con la oposición que señala los etarras en las listas que con aquellos que los han metido ahí. A Bildu solo le ha dicho esa frase flácida de "puede ser legal pero no es decente". Decente. Como si ETA no atentara contra personas sino contra las buenas costumbres. La segunda cuestión tiene relación directa con la primera. Y es que el gobierno quedó completamente paralizado cuando se conocieron las listas. No ha sabido reaccionar y ha asistido a esta con una inmoral pasividad.

Tras el Consejo de Ministros de hoy le han preguntado en un par de ocasiones a la portavoz Isabel Rodríguez si su gobierno había hecho algo para exigirle a Bildu que al menos, de los 44 colaboradores de ETA, retirara a los siete asesinos. Al fin y al cabo es su socio parlamentario, tienen una interlocución fluida. Ni una respuesta.