La mirada cítrica: El optimismo del FMI

En estos tiempos de pandemia de vez en cuando surgen tesoros inesperados, como es la exposición de Pasiones Mitológicas del Museo del Prado . Destacan las obras de Tiziano, Rubens, Varese y las incomparables Hilanderas de Velázquez, la historia de Aracne, según Plinio inventora del uso del hilo, y que por imprudencia terminó mal por enfrentarse a la todopoderosa Atenea, la diosa de la sabiduría.

La sueca H&M es uno de los gigantes textiles que tejen la economía europea y mundial del retail. El sector textil es uno de los sectores que más rotos presenta en sus cuentas por la pandemia. H&M ha presentado un plan de ajuste que afecta a 350 de sus tiendas en todo el planeta, 30 de ellas cerrarán en España, donde ha comunicado el inicio de un ERE para 1.100 de sus empleados.

La Covid sigue dejando sietes en la economía mundial.

Y eso que el FMI es optimista y cree que habrá mejoría. Por lo pronto, ha vuelto a mejorar sus previsiones sobre España. Cree que la economía de nuestro país crecerá este año un 6.4%, medio punto más que en la anterior estimación. Y esto ha servido para que el presidente Sánchez saque pecho y resalte que nuestro país será el que más crecerá de las economías avanzadas. Claro que Sánchez no recuerda que también fue el que más se desplomó

El FMI no solo habla de crecimiento. También habla del mercado laboral. Y aquí Moncloa mira hacia el tendido. El Fondo Monetario augura una tasa de paro del 16 con 8%. Es, con diferencia la más alta de los países europeos. Solo Grecia se acerca. Italia se queda en el 10% y el resto de las principales económicas de la zona euro están por debajo. Desde la época de Velázquez la rueca del paro siempre gira más rápido en España.

Al final, nos pongamos como nos pongamos. Hagamos lo que hagamos en estos instantes dos cosas está claras. La tasa de paro española cuadruplica a la alemana y el futuro económico pasa por la vacuna

Datos del paro de marzo

Hoy hemos conocido los datos del paro de marzo. Bajó el desempleo en 59 mil personas. Se puede hacer balance del primer año de la pandemia: 400.000 parados más. 330.000 cotizantes menos a la Seguridad social. 743.000 trabajadores aún en ERTES y 440.000 autónomos en cese de actividad

Todo esto con casi 4 millones de trabajadores en paro buscando empleo en el SEPE, el Servicio Público de Empleo, que, paradojas de la vida y del país solo encuentra trabajo al 2% de las personas inscritas en sus registros. Lo cual quiere decir que tener un trabajo ya es tener suerte.