La mirada cítrica: El ahorro del miedo

Los españoles guardan en sus depósitos bancarios más de 872.000 millones de euros. Nunca, ni en lo peor de la Gran Recesión, se había llegado a semejante cifra. Es lo que algunos expertos denominan el ahorro del miedo. Es guardar para las vacas flacas. A la vez, esos 872.000 millones de euros también reflejan una inmensa demanda embalsada. Necesidades no satisfechas durante el confinamientos. Gastos aplazados. Compras retrasadas.

Y cuando las tiendas abran de verdad, cuando los Centros Comerciales levanten el cierre, como antes, con normalidad, atraerán a sus cajas registradoras parte de ese dinero. Es lo que se espera, que el consumo reactive el complejo mecanismo de la economía. Pero hasta entonces algunos sectores derrapan.

Es el caso de la industria. Desde la reconversión industrial de los ochenta, desde el naufragio de los astilleros y el incendio de los tradicionales altos hornos no habíamos visto tanto riesgo en la industria. Nissan, Reanault, Alcoa, Arcelor son botones que muestran una dura realidad. Aún así los inversores bursátiles apuestan por mejores tiempos, en este mes el Ibex 35 se ha revalorizado un 2,5%.

Sin embargo, la caída de la producción y consumo en estos meses de Covid se aprecia también en el mercado de la energía. El precio de la electricidad en España se situó en mayo en poco más de 20 euros el megawatio/hora. Esto supone que en mayo el coste de la electricidad se desplomó un 57%, el mayor descenso desde 2007. No es extraño, casi todo el país estaba a media luz..