Tras la reunión del Consejo de política fiscal y financiera, las Comunidades Autónomas deberán reducir del déficit al 1,5%. Rita Barberá, alcaldesa de Valencia, valora esta exigencia del Gobierno y considera evidente la reducción de gastos y el ajuste 'no necesariamente en prestaciones sociales'. Cree que se ha generalizado mucho el tema del déficit autonómico ya que ‘no es lo mismo el despilfarro en un gasto superfluo que en una inversión productiva’. Según la alcaldesa se está viviendo una 'mala imagen interior impresionante en la Comunidad Valenciana' pero apunta que ‘ahí está la obra’: 'Nosotros hemos sufrido una malísima financiación y el gobierno socialista no ha reconocido a un millón de valencianos en prestaciones de sanidad y educación. Quizá nos hemos pasado en ambición pero no ha habido despilfarro'.
En referencia a la gestión de su ayuntamiento, Barberá afirma que 'la contribución de Valencia al porcentaje del déficit del Estado ha sido del 0,04% cuando el de los ayuntamientos de España es del 0,38%. Y eso es debido, apunta a que empezaron a hacer recortes cuando veían venir la crisis y decidieron empezar a aplicar un plan de austeridad'.
Sobre las manifestaciones de Valencia cree que se magnificó muchísimo el que fue una revuelta de 30 o 40 personas y que finalmente 'ha quedado como una acción política de la izquierda más radical'. Defiende a los cuerpos y seguridad del Estado en su 'acción profesional'.