Rafael recibió un requerimiento del Ayuntamiento de Barcelona en el que le informan de una multa porque su coche estaba estacionado en Barcelona sin el ticket de aparcamiento. Todo sería normal si no fuera porque el coche de Rafael jamás ha estado en Barcelona y por tanto no puede haber cometido una infracción allí. El caso es que tiene una multa de 64, 30 euros, que le aconsejan pagar porque recurrir el error le va a costar mucho más dinero.
El coche de Rafael está aparcado en un aparcamiento de Burgos sin control e entrada y salida por lo que, como él explica en Herrera en la onda, no hay nadie que puedda certificar que en la fecha de la multa su coche estaba ahí y eso complica el recurso. Le aconsejan que pague y calle.