Herrera arranca el editorial hablando de la ciclogénesis que se acerca a España llamada ‘Petra’ y que pondrá a una veintena de provincias s en alerta naranja y en zonas costeras se esperan además olas de entre cuatro y cinco metros de altura.
En clave económica, Herrera analiza los datos ofrecidos por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro que explicaba que el déficit del Estado del primer trimestre de 2012 es del 1,85%, es decir, 19.600 millones: "Si los cuatro trimestres fueran así ni de coña cumplíamos con el 5,3%. Hay que pegarle el tajo a muy buena parte de los 19.600 millones" Herrera se pregunta el porqué de estos datos y afirma que es debido o "a que los presupuestos han entrado tarde porqué al Gobierno le interesaba porque tenía de por medio las elecciones andaluzas o porque hacer unos presupuestos no es cosa fácil".
El Gobierno explica que ha transferido a las CCAA 8.000 millones y a la Seguridad Social que ha vuelto al superávit y el déficit homogéneo es del 0,83% que es un 11% menos que el año pasado. Así que la recesión ha hecho caer en este primer trimestre 2 puntos y medio hasta marzo. Datos adelantados por Montoro en el debate de la totalidad de los Presupuestos del Estado. Con ello dijo que hay que cumplir la ley y las CCAA que no lo hagan intervenirla ya que el déficit nos aplasta y el objetivo es combatir el déficit.
Después de las explicaciones de Montoro llegó el debate, "un cruce entre Montoro y Rubalcaba" según Herrera y ‘la pelea era ver a ver si mientes tu más o el otro más. Mientras uno le acusaba de mentir con el déficit, Rubalcaba lo acusaba de xenófobo por retirar las tarjetas sanitarias a los inmigrantes irregulares a partir del 31 de agosto’. Además, acusaciones entre Rosa Díez y el PP y CiU y el Partido Popular.
Dejando de lado la vertiente económica, la juez Alaya en Andalucía estuvo leyéndole durante una hora y media todo aquello por lo que se le imputa al exconsejero de trabajo de la Junta de Andalucía . En el auto, la juez dice que todo esto apunta a lo más alto de los gobiernos de la Junta porque por acción o por omisión Griñán y Chaves conocían las cosas que hacían sus subordinados.
