En un comunicado este martes, el cuerpo policial ha informado que los ancianos, de 93 y 88 años, contrataron a principios de 2017 los servicios de la mujer, quien se había instalado anteriormente cerca del domicilio familiar para ganarse su confianza.
El matrimonio la contrató para que realizase labores de limpieza y la compra diaria por 500 euros al mes, pero el último año las capacidades cognitivas de la pareja habían disminuido y se acentuó su pérdida de capacidad auditiva y de memoria, por lo que la cuidadora se ofreció a ayudarles con reintegros bancarios, como autorizada para llevar las cuentas.
La detenida aprovechó esta ocasión para presuntamente robar los ahorros del matrimonio, tanto en cuentas bancarias como en cajas fuertes que tenían en el domicilio, y cuya desaparición puso en alerta a los ancianos.
El matrimonio se dio cuenta y avisó a su sobrina que denunció la situación a los Mossos d'Esquadra y comprobaron que la detenida había sustraído 30.000 euros de sus cuentas bancarias y había conseguido ponerse como beneficiaria en la herencia de las víctimas.
Los agentes registraron el domicilio de la detenida, donde consiguieron recuperar 4.000 euros y documentación bancaria de la pareja de ancianos, así como información de los envíos de dinero al país de origen de la cuidadora, Venezuela.