según los primeros indicios está relacionado con un escape de gas

Una española, entre los tres muertos en una explosión en una panadería de París

Además de los tres fallecidos, doce personas se hallan "en urgencia absoluta" y otras 37 han resultado heridas leves. Entre los heridos hay una española, según ha confirmado el Ministerio de Exteriores.

ondacero.es

Madrid | 12.01.2019 09:58

Los bomberos de París trabajan en la extinción
Los bomberos de París trabajan en la extinción | Reuters

Al menos tres fallecidos, una española entre ellos, y decenas de personas han resultado heridas de diferente gravedad por la fuerte explosión en una panadería en el centro de París, informó la Prefectura de Policía, que corrigió así las cifras ofrecidas momentos antes por el ministro del Interior, Christophe Castaner, que en un primer momento informó de que habían sido cuatro.

Además de los fallecidos, doce personas se hallan "en urgencia absoluta" y otras 37 han resultado heridas leves, entre ellos un español.

Un portavoz de los bomberos, Eric Moulin, explicó en declaraciones a la prensa que de los cinco heridos en estado crítico dos son bomberos. Según el fiscal de la República de París, Rémy Heitz, los primeros indicios apuntan a un "origen accidental" de la explosión, producida por un escape de gas, aunque pidió ser "prudentes" hasta que se esclarezcan las causas.

"Primero hubo una fuga de gas, y llegaron los bomberos para atenderla. Después se produjo la explosión que provocó el incendio consiguiente", explicó a la prensa Heitz, lo que explicaría el número de bomberos heridos.

El ministro francés del Interior, Christophe Castaner, había alertado previamente de que el balance de víctimas por la explosión iba a ser "fuerte y grave", y no se descarta que vaya en aumento. Castaner, que se personó en el lugar del suceso junto al primer ministro, Édouard Philippe, explicó que más de 200 bomberos y un centenar de policías se han movilizado tras la explosión, que calificó de "muy espectacular".

Los edificios colindantes han sufrido grandes daños materiales, y han tenido que ser desalojados por motivos de seguridad, al igual que los numerosos hoteles que hay en el barrio, uno de los más turísticos de la capital francesa.