Diarios británicos publicaron imágenes de una de las dos mujeres siendo controlada por cuatro policías municipales en una playa del paseo de los Ingleses en Niza.
La primera instantánea muestra a la mujer con un pañuelo turquesa y blanco que le cubría el pelo y una túnica del mismo color de manga larga, mientras que en la siguiente se la ve quitándose la túnica bajo la mirada de los agentes.
También en Cannes, unos policías multaron a Siam, una bañista de 34 años que llevaba "hiyab" y que ha declarado a la cadena "BFM TV" que va a emprender acciones legales. "No llevaba 'burkini', no llevaba burka, no iba desnuda. Considero que mi vestimenta era correcta", dijo.
Los dos incidentes han generado un aluvión de reacciones de internautas denunciando lo sucedido y mostrando su indignación en las redes, dado que el velo no está vetado en los espacios públicos. "Llegamos incluso a desvestir a mujeres en la playa. Sois el hazmerreír del mundo", decía un comentario en Twitter de la militante Sihame Assbague, retuiteado al menos 11.000 veces.
Niza y Cannes forman parte de la quincena de municipios de la Costa Azul que desde principios de mes han ido prohibiendo en sus playas públicas el uso del "burkini", bañador islámico que cubre completamente el cuerpo de la mujer.
A la espera de que el Consejo de Estado, máxima instancia administrativa gala, examine mañana la legalidad de los decretos municipales que vetan esa prenda, al menos 16 mujeres han sido multadas en total desde principios de semana, según "BFM TV".
El Consejo Francés del Culto Musulmán ha pedido una reunión urgente con el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, para abordar la cuestión, sobre la que el Ejecutivo ha rechazado de momento lanzar una legislación específica.
El Gobierno apuesta, en cambio, por el cumplimiento firme de la ley en vigor contra el burka, que cubre todo el rostro, y el niqab, que solo deja ver los ojos, y de la que proscribe en centros educativos de primaria y secundaria todo signo religioso ostentoso.