La moción, que cuenta a priori con escasas opciones de prosperar en virtud del reparto de fuerzas parlamentarias, se someterá a votación el próximo jueves.
Si fuera aprobada, el Gobierno debería dimitir, mientras que, de ser rechazada, el proyecto de ley defendido por la ministra de Trabajo, Myriam el Khomri, quedaría adoptado en primera lectura por la Asamblea Nacional y pasaría al Senado.
La derecha disponía de hasta 24 horas para presentar su moción desde que el primer ministro, Manuel Valls, anunció hoy que se iba a saltar el debate parlamentario, pero presentó su censura al Ejecutivo sin agotar ese plazo.
El texto en el que justificaron su decisión, según los medios franceses, subraya que si el Gobierno se ve obligado a recurrir a ese instrumento constitucional es por el "punto muerto" al que el presidente, François Hollande, ha conducido al país.
Valls, en cambio, señaló hoy en la sesión del control al Gobierno que se ha decantado por ese controvertido artículo convencido de que esa reforma "es un buen texto para el país" y de que por esa razón debe adoptarse cuanto antes.
La última vez que el Ejecutivo recurrió al artículo 49.3 fue en 2015 con la ley de liberalización económica, más conocida como "ley Macron" por el nombre de su autor, el ministro de Economía, Emmanuel Macron.