Los investigadores Fernando Reinares y Carola García-Calvo han presentado este estudio realizado con los perfiles de los 150 supuestos yihadistas arrestados en territorio español por las fuerzas de seguridad desde 2013 hasta mayo de este año.
En él se desvela que solo el seis por ciento se implicó en las actividades relacionadas con el Daesh de forma solitaria y que únicamente dos de ellos tenían intención de desplazarse a Siria o Irak para cometer acciones armadas, pero no como lobos solitarios.
Tres de cada cuatro formaban parte de células que tenían enlaces organizativos con el Estado Islámico (EI) en Siria e Irak. Ocho de cada diez eran miembros de grupos que extendían su influencia a Marruecos y cinco de cada diez tenían a Turquía como país de tránsito para su desplazamiento a Siria e Irak.
La principal motivación para implicarse en esas actividades terroristas es de índole ideológica y utilitaria, es decir, se integran con la idea de la Yihad como imperativo religioso y con el convencimiento de la recompensa que recibirán más allá de su muerte en una acción suicida.