"Es absolutamente imprescindible que respeten la decisión de más de 2,2 millones de ciudadanos europeos que pudieron votar unas candidaturas", señaló en una rueda de prensa en Ginebra con relación a su derecho a ser eurodiputado.
Aseguró que es la Unión Europea la que se juega el prestigio y su "autoridad democrática" y dijo "tener mucha confianza en la Justicia Europea, que si tiene que decir algo va a decidir proteger nuestros derechos, también los de los ciudadanos europeos a elegir a sus representantes".
Puigdemont recordó una vez más que el presidente de la Eurocámara no ha respondido a los cuatro requerimientos oficiales que sus abogados le han enviado para reivindicar su derecho y el de Oriol Junqueras a ser eurodiputados y contar con inmunidad parlamentaria como tales.
"Su actitud ha sido inexplicablemente la del silencio, actuando más como presidente de una parte que no de todos los electos", lamentó el expresidente catalán.
Sobre la posibilidad de que las autoridades españolas reactiven la orden de detención contra él si finalmente viaja a Francia el próximo martes, Puigdemont criticó "el mal uso del Estado español" de este tipo de instrumentos "que entiende como un interruptor que se enciende a conveniencia de si estás o no en tal jurisdicción".
Si volviera a hacerlo "demostraría que está haciendo un uso absolutamente arbitrario, fuera de la propia directiva de esta herramienta de cooperación jurídica, aunque no es descartable".
Añadió que el uso de esta euroorden es contrario al espíritu de cooperación "pero España está acostumbrada a este tipo de cosas, recientemente no ha hecho caso a la resolución del grupo de trabajo del Comité de Detenciones Arbitrarias de las Naciones Unidas que pedía la liberalización de los 'presos políticos".
Puigdemont también valoró la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de no archivar el caso del presidente de la Generalitat, Quim Torra, según él una "mala noticia" que muestra cómo tras 20 meses se sigue sin entender el problema político, no jurídico, que vive Cataluña.
"Veinte meses después de arrestos, exilios, de artículo 155, no se ha entendido que se trata de un problema político que no necesita Código penal y juzgados sino diálogos, reconocimiento y respeto mutuo", comentó.
Sobre la decisión del ministro de Asuntos Exteriores español, Josep Borrell, de mantenerse en esa cartera y renunciar a su acta de eurodiputado, Puigdemont dijo que era algo que "no acababa de entender".
"Las razones que ha aducido ya estaban presentes cuando decidió presentarse a las elecciones, cuando compitió en ellas y cuando ya conocía el mapa de mayorías posibles en el Parlamento", señaló Puigdemont, quien también concurrió en las elecciones europeas del 26 de mayo y obtuvo un escaño en la Euorocámara, pero para poder entrar en ella debería recoger el acta en España.
"Entra en el ámbito de su libertad personal, pero es bastante sorprendente", concluyó el expresidente catalán en alusión a Borrell.
Puigdemont viajó a Ginebra para participar en el Foro Crans Montana, un ciclo de conferencias de alto nivel con 30 años de historia en el que este año ha sido ponente junto a mandatarios como el presidente de Armenia, Armen Sarkissian, o autoridades de Afganistán, Kosovo o Guinea.