El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, comparece hoy en el pleno del Congreso para presentar los últimos acuerdos europeos y los ejes de los próximos ajustes, un discurso rodeado de expectación en el que se comprobará hasta qué punto el Ejecutivo cumple las recomendaciones de Bruselas.
La UE le recordó ayer que España debe aprobar iniciativas adicionales sin demora para recortar el déficit público y Rajoy ya ha anunciado que se avecinan medidas difíciles, a pesar de que el país cuenta con un año más -hasta 2014- para situar el déficit público por debajo del 3 por ciento del PIB.
En el hemiciclo se encontrará con el rechazo de la oposición parlamentaria a algunas de las principales iniciativas avanzadas por el Ejecutivo, como la subida del IVA.
Junto a esta medida, el Gobierno baraja también, en línea con las peticiones de la Comisión Europea, reducir la fiscalidad del trabajo; poner en marcha impuestos vinculados al medio ambiente, como el "céntimo verde" que grabaría los hidrocarburos; o eliminar la deducción por compra de vivienda.
El Ministerio de Hacienda, que ha convocado para la tarde la mesa de la función pública, ha avanzado que se plantea ampliar las horas de trabajo semanales de los funcionarios y asemejar su régimen laboral al del sector privado, aunque los sindicatos temen también la eliminación de una paga extraordinaria.
La UE ha subrayado igualmente la importancia de los planes de ajuste de las comunidades autónomas, cuyos responsables de Economía asistirán el jueves en Madrid a una nueva reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera bajo la batuta de Hacienda.
Rajoy expondrá ante el pleno los resultados de la última cumbre europea, de la reunión del Eurogrupo celebrada el lunes y del Consejo de ministros de Economía y Finanzas que tuvo lugar ayer en Bruselas y detallará las condiciones impuestas para que la banca española reciba la ayuda europea.
Será este el último debate de calado del periodo de sesiones, aunque la semana que viene se celebrará una nueva sesión de control al Gobierno y la última del mes se ha convocado un pleno extraordinario para aprobar el techo de gasto de 2013, punto de partida de los próximos presupuestos.