La encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas, hecha pública hoy, se realizó entre los días 1 y 10 de julio y es la primera con estimación de voto desde el retorno de Sánchez a la Secretaría General del PSOE y tras los debates de las fallidas mociones de censura de Podemos contra Mariano Rajoy en el Congreso y contra Cristina Cifuentes en Madrid.
Según los datos del barómetro, si hoy se celebraran elecciones, el PP ganaría los comicios con un 28,8 por ciento de los votos, aunque pierde casi tres puntos respecto a abril, cuando obtenía un 31,5. El PSOE acortaría su distancia con los populares con un 24,9 por ciento de los sufragios, cinco puntos más que en abril y cuatro más que Unidos Podemos y sus confluencias que, aunque subirían seis décimas, se quedarían con un 20,3 por ciento.
Son significativos también los datos del voto directo, ya que según ese cálculo sin la estimación del CIS, el PSOE adelanta ya al PP y obtendría un 19,1 por ciento -casi seis puntos más que en abril- frente al Partido Popular, que pierde punto y medio, y se quedaría en el 17,1 por ciento. En la estimación de voto de julio, Ciudadanos pierde cuatro décimas desde la última encuesta electoral del CIS y obtendría un 14,5 por ciento.
La cuarta fuerza política sería ERC, que mantiene una previsión de apoyo electoral del 2,9 por ciento; mientras que el PdeCAT sigue bajando y pasa del 2 por ciento de abril al 1,7 en julio. El PNV se mantendría prácticamente inalterable con un 1 por ciento de los votos, seguido de EH-Bildu que pierde tres décimas hasta un 0,8, y cierra la lista Coalición Canaria (CC) con un 0,4 por ciento -una décima más que en abril-.
Dentro del grupo de Unidos Podemos y sus confluencias, la candidatura que más sube es la de la formación morada junto a IU, que crece casi un punto hasta el 12,8. En Comù Podem se mantiene con un 3,7 por ciento. Sin embargo, Compromìs pierde tres décimas hasta situarse en el 2,6 por ciento y En Marea mantiene sus expectativas electorales en 1,2 por ciento.