Según el sindicato, España está a la cola de Europa en hogares con acceso a Internet, con 7,5 millones de personas sin red en sus casas.
Un 21% de la población admite no haber entrado en Internet en 2015 y la causa no es tanto económica o de infraestructuras, sino de falta de interés.
Para el secretario general de UGT, Cándido Méndez, la situación más preocupante es la de los parados, que son los que sufren más brecha digital en toda Europa en un mercado laboral que cada día exige más conocimientos en tecnología.
El líder de UGT propone, para reducir esa brecha digital, un plan nacional de inclusión tecnológica y tarifas de acceso más baratas y cómodas para captar a los ciudadanos más reacios.