Los trabajos costarán 400 mil euros y durarán ocho meses, a partir de la formalización del contrato. Los arqueólogos tienen documentado que bajo la Roqueta existió una necrópolis de los primeros siglos del cristianismo. De hecho durante los trabajos de consolidación de la estructura del monasterio, acometidos recientemente, ya se encontraron varios enterramientos en el subsuelo de algunas de las salas del monasterio. Los colectivos vicentinos creen que incluso podría aparecer algún resto de San Vicente Mártir, cuya sepultura se cree que estuvo en este emplazamiento.
En cualquier caso, la excavación aportará datos sobre la historia del edificio. Y una vez acabada se podrá abordar la rehabilitación integral del monasterio para el que, por cierto, el Ayuntamiento sigue sin encontrar un destino concreto.