La investigación comenzó tras la denuncia de unos vecinos de Crevillent que alertaron a la Guardia Civil de la posibilidad de que se estuviese distribuyendo droga en una vivienda de las inmediaciones.
Una vez recopilada toda la información necesaria y habiendo identificado al joven que residía en esa vivienda, se procedió a la entrada y registro de la misma.
Los agentes encontraron en el domicilio 1,4 kilos de hachís, dispuesto en tabletas, preparado para su venta.
La droga intervenida está valorada en unos 8.600 euros, aunque habría superado con creces esta cantidad en el mercado final.
El detenido es un joven marroquí, de 18 años de edad, que ha ingresado en prisión provisional por estos hechos.