El desgobierno, el descrédito y el despotismo marcan los dos primeros años de legislatura según el PP
En el ecuador de la legislatura los populares en el Ayuntamiento de Castellón han rebautizado el pacte del Grau como el pacte del Frau.
Según el Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón las discrepancias surgidas, en los últimos meses, entre los grupos del tripartito en la ciudad podría ser el principio de su fin. Sin embargo la alcaldesa, Amparo Marco, asegura que no existe ninguna crisis y que son los populares los que deben valorar su propia crisis. Son unas valoraciones que llegan cuando este miércoles se cumplen dos años desde las elecciones municipales que supusieron un cambio de color político en el consistorio.
La portavoz popular, Begoña Carrasco, asegura que el ayuntamiento se ha convertido en la casa de los líos afectando negativamente a los ciudadanos y al día a día de la ciudad. Reflejo de ello destaca es la falta de cumplimiento de los acuerdos plenarios que dice han llevado a que los plenos se hayan convertido en un teatro. Junto a esto ha rebautizado el pacte del Grau como el pacte del Frau por la falta de cumplimento que dice se está dando. Según Carrasco se ha cumplido el 23 % de las 95 medidas planteadas de las cuales asegura la mitad son falsas.
Por su parte la alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, niega que haya una crisis entre los partidos que forman el pacto del grau. Considera que las tensiones son normales.
Para los populares en el ecuador de la legislatura han sido dos años de desgobierno, descrédito y despotismo por parte del equipo de gobierno. Acusa carrasco al ayuntamiento de mentir en cuanto a los impuestos y tasas que asegura han subido este año a pesar de los cerca de treinta millones de euros de superávit del consistorio. Un dinero que dice debería estar en los bolsillos de los castellonenses.